Las primeras 24 horas tras la cirugía de rodilla
La rehabilitación tras la operación de rodilla comienza en cuanto vuelvas a la habitación del hospital. Tu programa de rehabilitación contribuirá a que recuperes la fuerza, el equilibrio y el rango de movimiento de la rodilla. El programa se diseñará específicamente para ti y podría incluir un dispositivo llamado máquina de «movimiento pasivo continuo» que estirará y doblará tu rodilla suavemente para reducir la rigidez. Habrá otros ejercicios para fomentar la circulación de las piernas, como realizar flexiones y extensiones de tobillo o pedalear con los pies.
Es importante levantarse y empezar a moverse en seguida; de hecho, seguramente te pidan que te levantes en cuanto hayan transcurrido 24 horas tras la cirugía. Si padecías un dolor considerable antes de la intervención, seguramente disminuiste tu actividad y, por lo tanto, puede que los músculos de tu pierna se hayan debilitado. Tendrás que recobrar la suficiente fuerza como para poder controlar tu nueva rodilla y, además, empezar pronto a estar activo también estimulará la curación. El médico y el fisioterapeuta te facilitarán instrucciones concretas sobre el tratamiento de las heridas, control del dolor, dieta y ejercicios.
24 horas después
En las 24 horas posteriores seguramente empezarás a dar algunos pasos con ayuda de un andador. Te darán el alta en cuanto tu cirujano considere que estás suficientemente recuperado aunque cabe esperar que permanezcas unos tres días ingresado en el hospital tras la operación. Dependiendo de lo que determine tu cirujano, puede que te trasladen a un centro de rehabilitación durante unos días más. Normalmente, te retirarán los vendajes y los puntos antes de que abandones el hospital. Tendrás que seguir realizando los ejercicios en casa. Tu fisioterapeuta te informará de cómo llevar a cabo los cuidados domiciliarios adecuadamente y puede que además siga trabajando contigo.
Cuidados en casa
Es muy importante que sigas las indicaciones del cirujano. Además, aquí te facilitamos algunas sugerencias que puede que te hagan la vida más fácil cuándo estés en casa. Por favor, coméntalas con el cirujano antes de que te den el alta en el hospital:
• Si vas a utilizar un andador o muletas, cuando empieces la rehabilitación de la operación de rodilla, como apoyo para caminar, pregúntale al médico cuánto peso puedes poner sobre la pierna que está en recuperación.
• Recuerda que seguramente te canses con más facilidad de lo habitual. Puede que quieras programarte un periodo de descanso de entre 30 y 60 minutos a media mañana y a media tarde.
• Es más seguro y fácil sentarse y levantarse de la silla utilizando ambos brazos; además deberías evitar usar mobiliario bajo o demasiado acolchado. Para estar más cómodo, usa un cojín o almohadón para mantener el cuerpo erguido cuando estés sentado.
• Utilizar un asiento de inodoro elevado podría reducir el esfuerzo al que están sometidas las rodillas al sentarse y levantarse. Colocar una balda en la ducha a la altura del pecho contribuiría a evitar que tengas que inclinarte para coger objetos en la ducha.
• Un asiento de bañera (o banco) te permitirá sentarte al asearse para aumentar tu seguridad y comodidad.
• Podrías emplear una esponja de mango largo para alcanzar la parte inferior de las piernas. Las mujeres también podrían adquirir un alargador de cuchillas para rasurarse las piernas.
• Evita barrer, fregar y pasar la aspiradora. Utiliza plumeros de mango largo para pasar el polvo de objetos ubicados en lugares altos o bajos. Tu médico te comunicará cuándo puedes barrer, fregar o pasar la aspiradora.
• Puedes montar en coche pero debes seguir las instrucciones del médico para entrar y salir del vehículo. Puedes aumentar la altura del asiento del coche con almohadones que te protegerán la cadera y también las rodillas. El médico te dirá cuándo puedes conducir, que normalmente será entre cuatro a seis semanas después de la intervención. Si tu coche tiene cambio de marchas manual, habla con tu médico sobre tus limitaciones a la hora de conducir. Asegúrate de que puedes usar el freno sin sufrir molestias antes de conducir con tráfico.
• El estreñimiento es un problema frecuente tras la cirugía. A menudo se deberá a que tu actividad será limitada y a la medicación que puede que consumas para aliviar el dolor. Habla con el médico sobre tu dieta. Podrías incluir frutas y verduras frescas así como ocho vasos colmados de líquido al día, a no ser que el médico te indique algo distinto.
• Seguramente el médico te recete analgésicos. Por favor, sigue las pautas proporcionadas por tu médico sobre estos medicamentos.
• Es normal que exista algo de inflamación alrededor de la incisión. Estarás más cómodo si vistes ropa holgada para evitar ejercer presión sobre la incisión. Consulta a tu médico o a otro profesional sanitario cualificado sobre cómo cuidar de tu herida adecuadamente.
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